Veo que ya has dejado de lamerte las heridas. ¿Cómo van tus cicatrices pequeña? ¿estás ya acostumbrada ya al sabor de tu sangre?
Tienes una pata herida. No tienes muchas posibilidades así y no me gusta esa mirada triste. Tendrás que esconderte hasta que estés mejor.
y luego: PELEA.
