jueves, 16 de agosto de 2012

Cenicienta.

Me prometieron que tu olor sería dulce, tus manos firmes y suaves y tu pecho un lugar seguro....

...no hay nada tan mezquino como las promesas hechas para romper

Y ahora voy en dirección contraria a ellas como un alma que lleva el diablo.

Y que sea mi risa el maldito recuerdo que le quede a lo prometido!

; )


domingo, 12 de agosto de 2012

Pieza para dos manos.

Voy a contaros una pequeña historia. Muy corta porque no tengo en realidad demasiada imaginación...

He sido educada en el deber, en el sacrificio pero también en la ternura.



 Por eso a veces hago algunas cosas que ni yo misma puedo entender. Por deber. Kant seguramente lo explicaría mejor pero...yo no soy Kant.



De niña por una imposición paterna estudié algunos años de Conservatorio. Solfeo, canto, lo más básico.
Era realmente una obligación. Aunque era algo hermoso.

Ahí aprendí por ejemplo que la Música es una carrera, tan difícil y a veces exacta como las Matemáticas, que si quieres que suene bien tienes que entrenar todos los días. Todos. Que el violín es un instrumento celoso que hay que tocar todos los días o su madera no suena igual...



Eran a veces clases tediosas para una pre-adolescente con la cabeza llena de pájaros.



Sin embargo en ocasiones, el bedel llamaba a la puerta de la clase y le daba unas indicaciones en voz no muy alta a la profesora para que nos acercasen a alguna de las salas de perfecta acústica pintadas de blanco, con aquella madera clara.

Allí alguien nos esperaba siempre y siempre dignamente vestido de negro, dispuesto a darnos lo mejor: podía ser un pianista y un chelo, podía ser una bella voz. Tal vez violines.
Era mágico.







Como en la vida: de acuerdo, a veces no es tan perfecto como nos gustaría.







Pero a veces, por un instante, somos realmente afortunados.






sábado, 11 de agosto de 2012

Amnesia

Sólo recuerdo el sonido de los cristales rotos.
No recuerdo haber hablado con nadie.
Sólo que quería dormir.

Y no quiero recordar


domingo, 5 de agosto de 2012

jueves, 2 de agosto de 2012

"¿Quieres vivir o morir?"

No entiendo tus porqués
pero tengo que seguir adelante como si no me doliesen aunque no sea cierto.

Tus idas y tus venidas consumen como a una vela mi corazón cansado.



Y yo misma me ato las manos para no arañarme de dolor el rostro, una y otra vez con cada pérdida.
Yo misma me vendo una y otra vez, me amordazo me vigilo, me visto una camisa de fuerza.

para no morir de pena nunca más...otra vez.





; )






mis visitas...

lo más leido, por orden de lo más leido, claro...