lunes, 10 de enero de 2011

Desnuda


Nada es para mi tan seductor como su salvaje desnudez. Nada se puede comparar con el abrazo de su frescura. Nada tan perfecto como su sencillez y su olor.

Me acostumbré a que no estés y vivo bien sin ti. ¿Te extraña? fuiste casi un espejismo, sólo fue un instante, pero aún así, te lo confieso: mi tozudez me castiga y se niega a admitir que sea imposible algún día volver a verte.

Y como si fueras un diamante que encontré por casualidad, enloquezco cuando pienso qué hice mal, cómo te perdí, dónde y si realmente eras para mi o fue pura coincidencia encontrarte

VERDAD, por favor, prométemelo: aunque no tenga derecho a pedírtelo quiero volver a sentirte, aunque sólo sea de visita quiero volver a verte. Vuelve algún día por favor, aunque sea por un instante, para que pueda abrazarte.






; )

No hay comentarios:

Publicar un comentario

mis visitas...

lo más leido, por orden de lo más leido, claro...